info@efectodorsal.es

Nadar más rápido en triatlón

nadar más rápido en triatlón
Compartir es vivir!

Seguro que te has matado esta temporada entrenando y no consigues nadar más rápido. En este artículo te enseñamos tres consejos para que consigas mejorar la natación. Toma papel y lápiz y vamos a ello!

Cuida la posición

Los pies en alto para nadar más rápido

Cuida tu posición de los pies. Este es un error típico en nadadores principiantes que acaban de empezar a nadar.

El ángulo de la cabeza

La posición de la cabeza va a tener mucha relación con tu posición del cuerpo. Vigila donde miras y trata de fijar la mirada un metro aproximadamente delante de tu cabeza en el suelo de la piscina. Se considera un buen ángulo unos 15º de inclinación.

La cadera alta

Por último, si quieres nadar más rápido has de tener en cuenta que tu cadera también va alineada y no se hunde más de la cuenta para mantener una posición lo más horizontal posible.

Trabaja la técnica de natación

Para nadar más rápido lo más importante es tener una buena técnica. Hay muchos y variados ejercicios de técnica que podemos meter en nuestros entrenamientos de natación. No tengas miedo en buscar en Youtube ejercicios para poder implementar en la piscina aunque te recomendamos que busques un buen entrenador que te pueda echar un vistazo y corregir los fallos de técnica más evidentes. Con ello notarás un gran progreso en tu natación.

Lo mejor es trabajar la técnica al principio del entrenamiento ya que es cuando más fresco te vas a notar. Además, podrás transferirlo luego al resto del entrenamiento mientras vayas nadando y repasando mentalmente los puntos que has trabajado.

Te puede interesar:  Webinar - Introducción a la larga distancia

Nadar más rápido en el entrenamiento

Es importante sentirte rápido en la piscina también. Para ello podemos ayudarnos de series cortas, a ritmos por encima de nuestro objetivo en competición. Las series de 100 o de 200 son distancias que permiten mantener un ritmo alto en nuestros entrenamientos y nos van a ayudar a coger sensaciones de nadar más rápido.

Muchas personas trabajan la técnica y luego se pasan el resto del entrenamiento nadando en continuo o con series muy largas. El problema es que por la propia fatiga, muchos de esos metros dentro de la serie pierden calidad en la técnica de natación. Si somos capaces de nadar frescos y con buena técnica metiendo descansos cortos cada 100 o 200 metros seremos capaces de mantener una mejor técnica a lo largo de todo el entrenamiento.